estantería

Ramón Pedregal Casanova.

Ramón Pedregal Casanova.

No fue al colegio más que cinco meses; con seis, siete años trabajaba; vivió en la calle; fue recogido en algún momento por gentes caritativas; leyó cuanto libro tenía cerca. De toda persona que encontraba aprendía algo, y cuando era muy joven escuchó que alguien decía de El Conde de Montecristo: “-En este libro hay objetivo y corazón”.

Ramón Pedregal Casanova

“No creo que se deba permitir que un billete de 5 dólares se interponga entre un hombre y su médico”.

Junto al Ejército Popular chino en combate contra el invasor japonés, en una casita de campesinos, el 12 de noviembre de 1939 moría Norman Bethune, un médico que había formado parte de las Brigadas Internacionales en España y que era originario de Canadá. Aún faltaban diez años para el triunfo de la revolución.

Ramón Pedregal Casanova
Rebelión
Albert Einstein en Julio de 1937 al Congreso de Escritores Antifascistas y al pueblo español: “Lo único que, en las circunstancias que enmarcan nuestra época, puede conservar viva la esperanza de tiempos mejores es la lucha heroica del pueblo español por la libertad y la dignidad humana”.

Se ha editado el tercer volumen de las obras completas de Carmen Martín Gaite, recoge sus cuentos, poemas y obras de teatro. En Carmen Martín Gaite prima fundamentalmente el deseo de narrar, rompiendo con este impulso y en conexión con su época, los límites tradicionales entre géneros. En este tercer volumen, de cuentos, poesía y teatro, discurren temas y personajes del conjunto de su obra novelística.

Título: Panfleto para seguir viviendo.

Autor: Fernando Díaz.

Título: Mujeres encarceladas.

Autor: Fernando Hernández Holgado.

Marcial Pons Ediciones de Historia.

Título: Confesiones de un gánster económico.

Autor: John Perkins.

Traductor: José Antonio Bravo Alfonso.

Ediciones Urano. Año 2005. Barcelona.

Título: Cuentos completos.

Autor: Juan García hortelano.

Editorial: Lumen.

Enrique González Duro, psiquiatra del Hospital Gregorio Marañón, de Madrid, nos enseña en su libro “Los psiquiatras de Franco” el pensamiento que asistía a personajes psquiatricos como Vallejo Nájera, López Ibor, Merenciano y otros, y cómo instituyeron una psiquiatría nacional católica; con ese pensamiento y esas prácticas que llevaron al hilo del pensamiento y práctica psiquiátricos alemanes de las décadas del 30 y 40 del siglo XX, nazis, calificaban a los defensores de la República como locos.